- Área: 300 m²
- Año: 2014
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Fotografías:Albano Garcia
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El tema de la memoria y de la identidad, constituyen factores a tener en cuenta a la hora de proyectar arquitectura desde una óptica contemporánea pero respetuosa del legado histórico.
La Zona de Preservación especial es una zona que guarda una rica tradición residencial barrial con usos de tipo industrial vinculados al ferrocarril que aun se pueden apreciar. Episodio particular, el conjunto de las Mil casas, caracteriza el área. A pesar de su deterioro morfológico creemos que puede seguir siendo una referencia en términos de uso y de escalas (calle-vereda-patio-casa). Hoy el uso residencial es protagonista combinado con actividad institucional y comercial.
Creemos que el proyecto que presentamos a consideración intenta sintetizar algunas características tipológicas tradicionales del área (casas con patio y jardín) con la necesidad de densificación que plantea el presente.
En un contexto de alturas y morfologías homogéneas, preponderadamente de planta baja y un piso, se propone la construcción de cuatro viviendas con patios propios agrupadas en torno a un espacio libre común que toma la altura de la construcción lindera.
Su volumetría está definida en los términos de arquitectura contemporánea, como un volumen simple con un frente preponderantemente vidriado en la planta alta y a nivel cero se propone un “zócalo” semi transparente que funciona como tamiz del acceso principal y las cocheras, permitiendo vislumbrar desde la calle el “verde” interior. La idea de patio con jardín rescata la tradición de espacio unificador soleado y con óptima orientación, constituyéndose en el corazón al aire libre del conjunto.
Guardando el respeto y la consideración de un barrio que está bajo normas de Preservación, esta nueva intervención de escala reducida y enmarcada dentro de las normas vigentes de acuerdo a la Ordenanza de Ordenamiento Territorial y Uso del Suelo, trata de respetar y optimizar la fisonomía edilicia del entorno enriqueciendo el contexto.
Su materialidad se resuelve dentro de lo que se considera construcción tradicional: estructura de hormigón armado, mampostería de ladrillos cerámicos, revoques, cielorrasos de yeso, carpinterías de aluminio y cubiertas de chapa de zinc. El acabado final se materializa preponderantemente con paredes blancas interiores y exteriores y las carpinterías de color aluminio, creando un contraste donde predomina la naturaleza del material utilizado. Los solados son de lajas de piedra de San Luis.
En síntesis, tratamos de crear una arquitectura que brinde confort y habitabilidad al usuario y consecuentemente ponga en valor, en clave contemporánea, al entorno inmediato y al barrio en su conjunto.